El Gobierno de Cuba anunció este domingo (26.10.2025) un plan de evacuación y protección que involucra a casi 650.000 personas en las cinco provincias orientales de la isla, ante la inminente llegada del huracán Melissa, que podría impactar de manera directa el martes por la noche.

Durante una reunión del Consejo de Defensa Nacional, el presidente Miguel Díaz-Canel instruyó evacuar de inmediato a todas las comunidades situadas aguas abajo de presas, micropresas y zonas proclives a inundaciones, con el objetivo de garantizar la seguridad de los habitantes.

“Hay que trabajar intensamente lo que queda de domingo y lunes. Si nos preparamos para la peor variante, aseguramos la tranquilidad de todos. Este evento entrará de noche o madrugada, y lo que no hagamos ahora lo perdemos después”, advirtió el mandatario, quien también insistió en mantener una comunicación constante con la población, pese a las limitaciones eléctricas que enfrenta el país.

Según el Instituto de Meteorología (Insmet), Melissa es actualmente un huracán categoría 4 en la escala Saffir-Simpson, con vientos sostenidos superiores a 200 kilómetros por hora y lluvias torrenciales que podrían provocar graves inundaciones al tocar tierra por la costa suroriental. El organismo prevé que el fenómeno recorra el territorio nacional de sur a norte durante unas 12 horas.

Los presidentes de los Consejos de Defensa Provinciales reportaron, mediante videoconferencia, los preparativos en marcha para proteger a la población y los recursos esenciales. Entre las medidas destacan la habilitación de centros de evacuación, la organización de brigadas alimentarias y la protección de servicios sanitarios y de vigilancia epidemiológica, especialmente para los grupos más vulnerables.

En las provincias más amenazadas, los planes de protección avanzan a contrarreloj: en Santiago de Cuba se prevé evacuar a 258.579 personas; en Las Tunas, a 72.000; en Granma, a 110.000; en Holguín, a 69.000; y en Guantánamo, a 139.914.

De acuerdo con las cifras oficiales, cerca del 7 % de la población cubana se encuentra en alerta directa ante Melissa, un fenómeno que podría convertirse en uno de los huracanes más intensos que azoten la isla en la última década.

El director del Insmet, Celso Pazos, alertó que el sistema meteorológico mantiene una evolución “de gran intensidad” y que las lluvias que acompañan a Melissa “constituyen uno de los factores más peligrosos por el riesgo de inundaciones súbitas y deslizamientos de tierra”.

Las autoridades instaron a la ciudadanía a seguir las indicaciones oficiales y mantener la calma ante un evento que pondrá a prueba, una vez más, la capacidad de respuesta del país frente a los desastres naturales.